viernes, 8 de noviembre de 2013

LOS ESCLAVOS--LUIS BURGUEÑO


"Fui al mercado de chatarra y compré cadenas...
y luego fui al mercado de esclavos y te busqué, pero no te encontré (mi amor)*.
* ("Para tí mi amor”) del poeta francés Jacques Prévert )
Hoy a 200 años del fin de la esclavitud, decretada por la Asamblea de 1813» los seres humanos seguimos siendo esclavos.
En la actualidad numerosas labores de nuestras vidas nos encadenan y no nos dejan ser libres.
Porque como decía el filósofo Jean-Jacques Rousseau -inspirador de la Revolución Francesa- "El hombre ha nacido libre y por doquier se encuentra sujeto por cadenas”. ¿Qué nos encadena hoy y no podemos prescindir de ellas?
La tecnología es un claro ejemplo. Deseamos lo último en comunicación, que quizás no sea lo mejor. Ese flamante celular o tableta, aparta a ese aparato que nos acompaña desde nuestra infancia. Si hablo del teléfono de línea fija. Nos acordamos cuando regresábamos ce nuestras actividades cotidianas y preguntábamos si había llamado alguien. Y teníamos la respuesta. Hoy nos angustiamos si alguien no nos llama a nuestro celular, o no nos envía un correo electrónico o un mensaje de texto.
¿Estamos conformes con nuestras actividades, sea trabajo o estudio? o sucede como dice el poema de Garlos Barbarito “La nave de los locos”: “... ese silencio, el dolor, sin embargo, trabajo por un sueldo y me callo y me someto”.
¿Y lo que expresamos a nuestros semejantes y a veces nos arrepentimos de haberlo dicho?, Thomas Carlyle
nos advertía: "No ser esclavo de las palabras.” ¿Que quería decir con ello? Hablar con los hechos, decirse las verdades, no borrar con el codo lo que se escribe con las manos.
Simplemente no ser esclavo en el siglo XXI, para no ser lo que expresaba Arturo Jaureche en el siglo XX:"No se trata de cambiar de collar, sino de dejar de ser perro.” Y lo que anunciaba Almafuerte "No te des vencido, ni aún vencido; no te sientas esclavo, ni aún esclavo.”

No hay comentarios: